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Estilos de Vida

Abriendo puertas

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Pequeños placeres

El Elogio, cuando es sincero, da acceso a la alegría al que lo recibe. Quien elogia, es una persona cuya Estima está en un buen nivel. Las murmuraciones, traen una carga negativa lo cual produce una descarga de emociones negativas, en cadena, se producen otras murmuraciones, en ocasiones afectando las emociones a otras personas.

Cuando las cosas materiales tienen mucha importancia en el diario vivir de los seres humanos, los vacíos existenciales perduran. No solo las cosas materiales son lo que llenan, lo que da felicidad y alegría. Hay cosas o eventos intangibles, las cuales si producen alegría y felicidad.

Cuentan en una anécdota que el Científico Einstein, dijo en una ocasión, contestado una preguntas de un periodista, que lo que le hacia bien feliz era, comerse una barquilla con helado. Recién alguien me comento que un “domplin”, le daba satisfacción y la oportunidad de satisfacer un antojo. Otros prefieren una piragua de frambuesa con tamarindo o dos limberghs de coco machacados en una taza gruesa con un tenedor, limberghs de cubeta.

Una caricia con ternura, a quien le corresponda, una sonrisa acompañada de ojos que brillan, un apretón de manos, una mano en el hombro, una abrazo o un beso: son expresiones positivas de gran valor.

El apego desmedido, con el consentimiento de muchos padres, de nuestros niños y jóvenes al Celular, les alejará de una convivencia sana donde el compartir alegrías, sueños y anhelos, sea el norte.

Hace años que tengo un Celular, no le he permitido al mismo que gobierne mi Vida, no soy esclavo del mismo. Hago llamadas, recibo llamadas, leo noticias, tengo Twitter, me tomo el pulso, me da información sobre ls tensión emocional y me cuenta los pasos que doy al día.

Los Padres, que en su mayoría son los que pagan el costo del Celular, deben, si no quieren mudos, ciegos y cortos de palabras, poner las Reglas en el uso del Celular. Hay mayores que también son esclavos de este útil instrumento. En ocasiones hacen que las filas en las cafeterías y en los bancos, se atrasen, no pueden despegarse. Algunos hablan en voz alta cosas personales y hasta pelean por el celular con palabras soeces.

Posiblemente los esclavos del celular no lean este Blog. No empece, creo necesario alertar a la gente inteligente y sensible, para que pasen la voz y en las escuelas y templos, haya foros donde se discuta esta epidemia existente.

Recientemente 3 damas de la edad oro se sentaron en mi mesa de merendar, mientras conversábamos, hubo un palique amable e interesante, solamente tomé el celular para leer un masaje de texto que recibí.

Cada día desfruto en mi caminar, de experiencias de amistad y breves conversaciones con gente amable y respetuosa. Tengo el don del humor, a diario lo uso… casi siempre con desconocidos, otras veces con quienes me conocen y yo no los conozco o recuerdo, porque como maestro, actor y conferenciante, me he comunicado con muchas personas, de todas las edades, aparte de mis intervenciones en la radio, internet y prensa escrita.

Agradezco la amabilidad expresada por muchos y los saludos frecuentes que recibo… Gracias,.. y todavía hay quien duda de que yo soy rico.

Prof. José Antonio Giovannetti Román

@AntonioGiovan13   en Twitter

Al Rescate de la Esperanza, que anda Realenga… y hay que Atraparla

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