Efesios 6:2-4 Reina-Valera 1960 (RVR1960)

 “Honra a tu padre y a tu madre, que es el primer mandamiento con promesa;

 para que te vaya bien, y seas de larga vida sobre la tierra.

 Y vosotros, padres, no provoquéis a ira a vuestros hijos, sino criadlos en disciplina y amonestación del Señor”.

El domingo 17 es el Día de los Padres. Algunos reciben Regalos materiales, otros no.  Llegarán cajas en bolsas con cintas y una tarjeta de felicitación. Eso no es malo. Hay quien prepara su Tarjeta artesanalmente, es algo especial. Son muchas las tazas, medias, camisas y pantalones de ir a la playa, los que se reciben, no está mal.

El mejor regalo, a mi entender, es: la obediencia, el respeto la compañía, la Ayuda en el momento necesario. Hay Regalos que no se compran en Tiendas o Mega Tiendas. Algunos padres se les hace difícil, cortarse las uñas de los pies o de las manos, otros ya no pueden arreglarse el bigote, algunos no pueden leer el periódico o el libro que tienen a mano, tal vez, hay quien necesita quien les lleve a hacer la compra al Colmado de la esquina o al Supermercado. Existen Padres que les place cuando los hijos asisten al Templo donde ellos se congregan.

4 años : Mi papá puede hacer de todo.
5 años : Mi papá sabe un montón.
6 años : Mi papá es más inteligente que el tuyo.
8 años : Mi papá no sabe exactamente todo.
10 años : En la época en que mi papá creció,
las cosas seguramente eran distintas.
12 años : Oh, bueno, claro,mi padre no sabe nada de eso.
Es demasiado viejo para recordar su infancia.
14 años : No le hagas caso a mi viejo.
¡Es tan anticuado!
21 años : ¿Él? Por favor, está fuera de onda,
sin recuperación posible.
25 años : Papá sabe un poco de eso,
pero no puede ser de otra manera,
puesto que ya tiene sus años.
30 años : No voy a hacer nada hasta no hablar con papá.
40 años : Me pregunto cómo habría manejado esto papá.
Era inteligente y tenía un mundo de experiencia.
50 años : Daría cualquier cosa por que papá estuviera aquí
para poder hablar esto con él.
Lástima que no valoré lo inteligente que era.
Podría haber aprendido mucho de él.

Autor del poema: Ann Landers

Mi padre Pedro María Giovannetti Aquino ya no está presente, sus enseñanzas si. Tengo gratos recuerdos de un hombre trabajador y con visión futurista. Tenía una letra bonita, tal vez fue una de las cosas que heredé de él. Bajito de estatura, grande de corazón. Saber compartir con los demás fue algo que nos enseñó. Era experto subiendo a los palos de quenepas y cogiendo jueyes en la noche. Extremadamente pulcro. Daba gusto verlo lavarse la cara y las orejas. Gustaba del buen vestir y el buen comer.

Existen miles de excelentes Padres en Puerto Rico, unos pocos, son olvidadizos. La gran mayoría de los hijos son buenos, hay quienes se olvidan de las necesidades de sus Padres.

Al acercarse el Día de los Padres, hay que saludar a los Abuelos y Bisabuelos… por ahí también hay tatarabuelos. Dios os cuide.

Prof. José Antonio Giovannetti Román

@AntonioGiovan13 en Twitter

Al rescate de la Esperanza, que anda realenga… y hay que atraparla