Al Rescate de la Esperanza, que Anda Realenga… y hay que Atraparla

Han sido dos días tremendamente malos. Una de mis expresiones repetidas es  “Usted es tremendamente Importante, creatura de Dios, y El no hace porquerías.” Me lo aplico a mi mismo. Sigo en el Camino. Uno de los problemas, para mi de gran importancia, fue que el Dashboard donde escribo el Blog se había trancado, no podía leer ni escribir. Hice innumerables gestiones, al fin, pasadas las 3:30 p.m. de viernes, volvió la Plataforma de los Blogs, en mi Caso. Es como si hubiera estado bloqueada, eso me bloqueó.

“Todas las adversidades que he tenido en mi vida, todos los problemas y obstáculos, me han fortalecido. Uno no se da cuenta cuando sucede, pero una patada en los dientes puede ser lo mejor que le puede pasar en un momento dado.”

Walt Disney.

En la mañana, en la Cafetería de siempre, tuve una extensa e interesante conversación con un Corso por partida doble. Un hombre emprendedor, simpático, de buen hablar y proyecciones de futuro. Es Agricultor. Lo había conocido de joven, hacía años de años que no lo veía, peina canas con dignidad. Es un hombre bondadoso, Tiene cuatro Fincas entre Guayanilla y Yauco. Tenía una hermana, la cual era hermosa cuando joven, vivía cerca de las escuelas. Tristemente, me informan, su mente está, al presente, fuera de la realidad. Sin embargo, su padre de 102 años, está lúcido. El caballero lo visita con frecuencia.

Un día, al paso del tiempo, los que son jóvenes tendrán más años, su pelo se tornará blanco, el viejo sombrero se buscará en el baúl y el bastón estará en sus manos. Cada momento tiene su encanto, dependiendo de ls expectativas que se tengan. El tiempo pasa inexorablemente. La mochila debe tener un hueco para que se resbalen y se aparten los malos recuerdos, permanezcan los buenos. Un ayer bien vivido trae como consecuencia un buen futuro, una buena y saludable existencia. Cuando alguien me falta, evito faltarle a otro. La sana convivencia propicia que nos acerquemos a la felicidad. Un día tras otro, paso a paso.

Te espero en la esquina, o en la Cafetería de siempre. Cuídate!

Entre jueves y viernes hice 13 llamadas telefónicas y no me contestaron. Parece ser que los viernes muchos no trabajan. Tal vez al conocer mi teléfono no me quieren hablar, no quieren contestar. A mi no me molesta que me digan No, lo que me molesta es la insensibilidad para no poder contestar una llamada. Eran distintos Asuntos o temas que necesitaba resolver, los Asuntos se quedan en el tintero, no cejaré, volveré a llamar. Julio Santos vino, cumpliendo como siempre. Ese caballero es un Servidor Profesional que cumple lo que su palabra dice, y no es para lamerle el ojo. Muchos deberán imitarlo.

A pesar de los problemas no resueltos y los Asuntos no tratados, tuve encuentros y reencuentros muy agradables. Experiencias significativas para dar aliento. “No se crea, aunque tenga la mascarilla, lo conocí por la voz”, me dijeron algunos Paisanos en el camino. Atendí tres Grupos de estudiantes de Escuela elemental, alrededor de 60 Estudiantes. Algunas de las personas amables que tuve reencuentros, viven en los Estados Unidos y estaban de Paso, viejos con espîtu joven los cuales fueron estudiantes de este Viejo Maestro.

Mi propósito de dibujar sonrisas, dar Consejos de Salud y provocar carcajadas, lo cumplí, aunque hubiera espinas, sinsabores y penas rodeando mi mente. A veces hay que ser como el Payaso, reír. En esta semana, más que en otras, el librito Consejos del Abuelo ha corrido mejor. Un Amigo de la mesa, me obsequió pagando el triple del costo del librito, como Regalo. Los regalos no se rechazan. Soy bendecido a pesar de los pesares. Espero por tu llamada para encargarlo.

Prof. José Antonio Giovannetti Román     (Abuelo Juancho)   787 644 8818    787 856 1610 @AntonioGiovan13  en Twitter