“Confía en el tiempo, que suele dar dulces salidas a muchas amargas dificultades’”

(Miguel de Cervantes)

Dos personas que aprecio y valoro mucho, me cerraron puertas. Como es mi costumbre, abrí ventanas… y si acaso se hubieran cerrado, estaba listo para mirar por una rendija. No fue necesario, se abrieron otras puertas. Logré estar en distintos escenarios de la vida cultural y educativa de mi Pueblo. Ofrecí Clases a niños de escuela elemental, hubo una escuela en donde impartí mi Motivación a  99 Estudiantes. Había que ver las caras de curiosidad y de alegría de esos educandos y las cooperación de Maestros y empleados.

Es de muchos conocido, que yo digo que doy Clases en la fila del Correo y en las oficinas de Espera para ser atendidos los Pacientes por los Médicos. Ofrezco consejos en la acera y dentro de los Comercios, no tengo limitaciones para compartir mis conocimientos y disfrutar ratitos de humor y camaradería, con conocidos y desconocidos.

En ese caminar se me ofrece la oportunidad de ofrecer mis libritos a los Paisanos con los cuales interactúo. Hasta me monté en una Guagua Turística, donde personas de mediana edad y de la edad de oro me permitieron les hablara algo de Yauco, al finalizar la breve charla, me compraron libros, me dijeron se los dedicara y me pidieron retratarse conmigo. Una grata experiencia. Una puerta abierta.

Estuve en un Velatorio de un familiar y llené con letra bonita la información requerida en la libreta de firmar y luego me dirigí a los presentes con palabras de reconocimiento a la persona fallecida y de aliento a los familiares que se portaron muy bien con ella en vida. Aporté Consejos en privado a personas que me los solicitaron, Dibujé sorisas, aunque fuera un Velatorio, porque las tensiones hay que hacerlas livianas.

En el diario vivir hay un Mosaico de oportunidades para la buena convivencia y con equilibrio hacer malabares y piruetas a favor de acercarse a la felicidad. Soy un Optimista tenaz el cual también tiene sus tristezas, no permito que habiten por mucho tiempo en mi mente y drenen mi energía positiva.

Donde me tomo mi Merienda, hoy fue un gran día, conversé en la mañana y en a noche con gente amable y simpática, la noche anterior con una ex estudiante triunfadora, ya adulta . A veces creo que a Esperanza Realenga la atrapo, aunque sea por breves momentos… por eso sigo tras ella.

“Por muy larga que sea la tormenta, el sol siempre vuelve a brillar entre las nube”.
» Khalil Gibran (1883-1931) Poeta, pintor, novelista y ensayista libanés

Prof. José Antonio Giovannetti Román

@AntonioGiovan13   en twitter

Al Rescate de la Esperanza, que Anda Realenga… y hay que Atraparla

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