Nostalgia… ayer
Acá en Yauco había varios centros de Tertulia cotidiana. Recuerdo de niño los Puntos donde amigos, conocidos y desconocidos, se reunían a platicar y de vez en cuando decían su chiste. Uno de los más famosos era el que llamaban “Las Cuatro Esquinas”, calle Comercio cruzando la Dr. Ramón Emeterio Betances. Llegaban de uno en uno y veces dos a la misma vez, tal vez no pasaban de seis habladores. Otro Punto en en el callejón donde Pablo, el Negro hacia su función de Limpiabotas, le faltaba la mitad de una pierna y siempre tenía su boina puesta.. Allí el tema más frecuente era el de los Deportes, algunos de los habladores eran Jugadores de Volybol.
En el Negocio de “Chito”, en la Manuel A. Negrón los habladores jugaban dominó y tomaban cerveza, o se daban el trago, siempre había temas para hablar, variados.
“Calazán”, el Barbero, tenía un pequeño grupo, que aunque no se fueran a recortar, les gustaba compartir en su Barbería. Por la calle Dr. Manuel Pasarell Rius estaba localizada la Imprenta de don Andrés M Santiago y la Funeraria. Su hijo, don Ariel Santiago Velázquez le dio continuidad a ambas Empresas y tuvo su famoso Periódico local “Reportaje”, donde con punta de lanza señalaba muchas cosas que había que corregir en el Pueblo, pasado el tiempo, presidió la Asamblea Municipal… hombre pequeño de espíritu inquieto. Fue mi Fotógrafo de bodas.
En la Terraza “Las Columnas” eran muchos los que llegaban temprano para una manita de dominó e ingerir cervezas. El poeta don Onelio Torres Cuprill era uno de los asistentes, el cual llegó a escribir una Columna en un Periódico local con el seudónimo de Crispín. Entre dos columnas “Moña” tamboén brillaba zapatos, con anilina y betún.
De noche, en la Plaza llamada hoy Fernando de Pacheco de Matos hubo un tiempo de tertulias sin estar pendientes al reloj, hablaban de todo un poco. Muchos de aquellos parlantes, ya han muerto. Los Puntos de Conversación han ido desapareciendo, para algunos, de gratos recuerdos.
Ese era el tiempo en que la gente iba por las noches a ver las Vidrieras y observar la ropa y zapatos que se exhibían, algunos paraban en el Tastee Freeze para comer helados, otros iban a la Panadería Borinquen a comprar el pan, a menos que no se encontraran antes con Chago, el panadero que en un carrito de lata rojo llevaba las libras de pan caliente mientras, fumaba su cigarro.
Cercano a las 10:00 pm los “Guardias Palito” entraban en escena, eran los que velaban la calle Comercio y algunas casa cercanas, con las cuales hacían trato de pago semanal, si mi memoria no me falla, sus nombres eran don Manolo y Rate, llevaban una macana la cual hacían sonar en el pavimento, como recordatorio a los Clientes que estaban haciendo su labor de Vigilantes nocturnos.
Un ayer de gratos recuerdos, mucha amistad y compartir, la tertulia viva y el caminar por las calles sin temores. Es es parte de mi Yauco de recuerdos, al cual llegué a los 5 años… nostalgia.
Prof. José Antonio Giovannetti Román
@AntonioGuivan13 en Twitter