Ante la Cruz
Cada Año son muchas las personas que recuerdan lo ocurrido hace muchos años, en el Gólgota cruel. En esa semana acostumbramos a asistir al Templo de preferencia. Hay quienes solamente asisten 3 veces al Año: Acción de Gracias, Despedida de Año y viernes Santo. En el resto del Año, algunos no disponen de tiempo, otros cogen vacaciones locales o en el extranjero.
Hay quienes han olvidado lo ocurrido en el Monte Calvario y a quién crucificaron… y el motivo de la Crucifixión. En la libertad de conciencia de cada cual, los seres humanos toman las decisiones que crean correctas.
Inmolado fue en el madero en forma de Cruz un joven de 33 años. Antes de ese suceso, hubo quien lo negara, como hay hoy quienes niegan su existencia, en el derecho que les asiste de pensar. Hubo quien lo vendió, cercano a Él, por 30 monedas de plata. A los 30 años habrá sido bautizado en el Rio Jordán. La conciencia de aquel Judas lo atormentó al extremo de quitarse la Vida, se ahorcó.
Sería saludable y pertinente acercarnos a la Cruz, una vez más, con actitud solemne, para pedir perdón. Hemos fallado, repetitivamente, a los preceptos cristianos. Aunque no lo neguemos con palabras, pudiese ser que si lo hayamos hecho con nuestras acciones o pensamientos. No lo hemos vendido a cambio de 30 monedas, pero hemos olvidado: su sacrificio, la Corona de Espinas, los Clavos, la lanza, el vinagre amargo, los azotes.
Nuestra existencia en el Mundo terrenal presenta una gran variedad de escenarios, en los mismos nos desempeñamos en diversas posiciones, donde tenemos que asumir responsabilidades y asumir posturas. Dependiendo de cual haya sido nuestro acercamiento o relación con el Jesús de Nazareth, así serán nuestras acciones cónsonas con sus preceptos o mandamientos.
Ante la Cruz, postrarnos, pedir perdón y encaminar nuestros pasos por el verdadero camino, en gratitud al sacrificio del Calvario.
No debemos olvidar que el Crucificado murió, fue enterrado y al tercer día venció la muerte. Resucitó. Murió para darnos Vida y hoy vive a la diestra del Padre.
Prof. José Antonio Giovannetti Román
@Antonio Giovan13 en Twitter
Al Rescate de la Esperanza, que anda realenga… y hay que atraparla