¡Que fácil es odiar! Es tan fácil “demonizar” a las personas que etiquetamos como “el otro” y odiarlas. Es tan fácil sentir antipatía o aversión hacia otras personas, deseándoles el mal.

• Odia el rico & odia el pobre.
• Odia el sabio & odia el ignorante.
• Odia la persona educada & odia el obrero no diestro.
• Odia el hombre & odia la mujer.
• Odia el viejo & odia el joven.

Es tan fácil odiar…

El problema es que el odio tiene consecuencias reales que afectan a la humanidad. El odio conduce a la violencia y, eventualmente, a la muerte.

Sí, amada gente, la lucha contra la violencia en todas sus manifestaciones es muy importante. La crítica a los discursos de violencia es mucho más que un soliloquio o una perogrullada. ¿Por qué? Porque los discursos de violencia justifican y validan actos de violencia en nuestra sociedad.

Durante mi ministerio pastoral he visto de cerca las consecuencias de la violencia:

• El discurso de odio contra la mujer redunda en violencia de género.
• El discurso de odio contra las personas inmigrantes redunda en actos de racismo que afectan la vida de los grupos comunitarios.
• El discurso de odio contra las religiones redunda en actos de violencia contra las comunidades religiosas, particularmente las minoritarias.

He visto demasiadas víctimas de la violencia para quedarme ciego ante ella. Por eso, no patrocino discursos de odio, a pesar de que siempre hay alguna persona que me critica por no atacar a tal o cual grupo.

Odiar es fácil; amar es difícil. Jesús de Nazaret nos llama al amor, que es la única fuerza que puede transformar positivamente tanto a las personas, en su carácter individual, como al mundo, en general:

Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.

Mateo 5.43-45

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El Rev. Dr. Pablo A. Jiménez es el pastor de la Iglesia Cristiana (Discípulos de Cristo) en el Barrio Espinosa de Dorado, PR. http://www.drpablojimenez.com y http://www.prediquemos.net.