Carmen Rodríguez  mejor conocida como Tita,  falleció el pasado 8 de enero y quienes en vida compartimos caminos con ella, sentimos que hay duelo en el tercer sector. Duelo, porque sentimos la partida de un ser  junto a quien creamos tantas gestas en pos de nuestras comunidades y de Puerto Rico.

Desde United Way (Fondos Benéficos Unidos) Tita lideró muchos proyectos de servicio para niños, jóvenes, mujeres, hombres, ancianos, buscando siempre que cada centavo invertido rindiera fruto en las vidas que se tocaran a través de las organizaciones.

Personalmente la conocí hace más de 20 años en los Centros Sor Isolina Ferré, donde Fondos Unidos nos ha apoyado con diversos programas en la trayectoria de nuestra organización. Tita le tenía gran cariño Sister Isolina Ferré y creía en su misión, como en la de tantos héroes de esta tierra que se dedican al trabajo comunitario.

Doy fe del espíritu incansable de Tita. De su fiscalización a veces con mirada pícara que cuestionaba, pero que siempre acompañaba con su hermosa sonrisa. Nos ayudaba a ver áreas de oportunidad y señalaba fallas a corregir para el mejor desarrollo y administración de los proyectos. Mujer llena de humanidad y sensibilidad que sin hacer mucho ruido en las redes sociales, estuvo presente de modo activo en la historia del país en medio de los grandes retos que hemos atravesado.

Coincido con el amigo Rafael Torrech San Inocencio, quien ha sido voluntario y colaborador de Fondos Unidos y quien describe a Tita como alguien que “Por décadas fue el alma de Fondos Unidos de Puerto Rico. Me aventuro a calcular en miles las organizaciones locales sin fines de lucro que fueron tocadas y ayudadas por su mano amiga y comprensiva”.

Hoy escribimos sobre ella para honrar su legado, para que quede en la memoria histórica una trayectoria de quien por muchos años toco la vida de tantas personas que quizás nunca la conocieron pues ha sido Ángel detrás de los servicios que hemos prestado. Pero así también, estoy segura que miles de líderes del tercer sector la conocieron y lamentando su partida al igual que yo, la recordaremos como el alma de pequeñas y grandes iniciativas que han ayudado en la transformación de muchas vidas en Puerto Rico.

Descansa en paz y gracias por tu servicio de tan alta excelencia a Puerto Rico.

La autora es Trabajadora Social, Entrenadora de Enfoque Corporal  y Directora del Instituto a Para el Desarrollo Humano a Plenitud de los Centros Sor Isolina Ferré Inc. empresa social dedicada al ofrecimiento de talleres y vivenciales para propiciar el crecimiento y la sanación interior en personas que deseen asumir un liderato afirmativo de sus vidas y vivir plenamente.

lortiz@csifpr.org