Con la posible excepción del deporte de bolita y hoyo, donde, hasta donde yo sepa, todavía ningún boricua ha sido exaltado al Salón de la Fama, Puerto Rico ha tenido grandes figuras que se han destacado en múltiples deportes.
Pero también es cierto que no muchos podrían discutir que, a través de los años, el boxeo y el béisbol son los dos deportes que más estrellas mundiales han producido.
Por si hiciera falta probarlo, en las próximas semanas vamos a tener un claro ejemplo de ello: el 5 de diciembre, para empezar, se anunciarán los tres nuevos seleccionados al Salón de la Fama del Boxeo Internacional, que tiene su sede en Canastota, Nueva York, donde ya hay debidamente exaltados once puertorriqueños.
Y el 22 de enero, además, se hace el anuncio de los nuevos exaltados al Salón de la Fama del béisbol, con sede en Cooperstown, donde ya hay cuatro boricuas.

Y, en ambos casos, hay al menos un legendario atleta puertorriqueño que figura entre los favoritos para unirse al clan.
Dan Rafael, posiblemente el escritor de boxeo más leído y más influyente de la actualidad, acaba de revelar que él votó por Iván Calderón para entrar al Salón de Canastota sin tener que pagar su taquilla.
Rafael, entre otras cosas, dijo que él también votó por Calderón el año pasado, cuando el dos veces excampeón boricua fue elegible por primera vez, al haber transcurrido cinco años desde su último combate.
El Salón de la Fama Internacional difiere del que existe en el del béisbol, en el que se exige que cada candidato reciba un mínimo del 75% de los votos para resultar electo.

En el caso del boxeo, donde participan más de 100 votantes, en su mayoría miembros de la Asociaciֶón de Escritores de Boxeo de América (Boxing Writers Association of America), de Estados Unidos, y contados historiadores y periodistas boxísticos del resto del mundo, todos los años se eligen tres nuevos miembros de la época reciente, en este caso peleadores que no hayan hecho su última pelea antes de 1989.
El año pasado, sin embargo, Rafael admite que fue uno en que la nómina de nuevos elegibles era muy sólida y que por consiguiente, era de esperarse que tres de los nuevos –Erik Morales, Vitali Klitschko y Winky Wright– fueran los electos.
Otros periodistas han dicho que Calderón quedó cuarto, algo que no se puede corroborar debido a que en la votación del boxeo no se divulga la cantidad de votos recibidos, también al contrario de como ocurre en el béisbol.

Este año, sin embargo, según Rafael, “por primera vez, en los 16 años que llevo votando, no hay un solo candidato automático”.
Los tres nuevos elegibles son el mexicano Rafael Márquez, un excampeón gallo y supergallo, el excampeֶón pluma Chris John y el exmonarca supermediano Mikkel Kessler.
Rafael explicó que, de estos, solo votó٠ por Márquez, y que sus otros dos candidatos principales fueron Calderón y el fenecido Genaro ‘Chicanito’ Hernández, quien lleva varios años en la papeleta.
Cabe esperar, pues, que pronto aumente la cifra de exaltados boricuas, que actualmente es de 11.

Por otro lado, en el béisbol, Edgar Martínez ha venido registrando en los últimos años un aumento paulatino en los votos que ha obtenido para entrar al Salón de la Fama, el año pasado alcanzó su nivel más alto -quedándose a apenas 20 votos de lograr el necesario 75%- y este año, en su décimo y último año de elegibilidad por votación directa, cabe esperar que el legendario toletero por fin logre alcanzar la inmortalidad.
Nadie discute que tiene los méritos como uno de los mejores jugadores ofensivos de todos los tiempos y posiblemente, también, el mejor bateador designado de la historia, luego de promediar .312 con 309 cuadrangulares y 1,261 carreras impulsadas con dos títulos de bateo en su carrera de 18 años en las Mayores, todos ellos con los Marineros de Seattle.

Si hubiera jugado mayormente en tercera base -su posición original-, ya de seguro hubiera entrado, pero en su caso, la exaltación de Edgar ha tenido que batallar contra un prejuicio que, al parecer, aún reina en el criterio de los miembros de la Baseball Writers Association of America (BWAA), los más de 400 periodistas de béisbol acreditados para votar: la idea de que un bateador designado no es un jugador completo, y, por lo tanto, merece menos consideración.
A pesar de todos esos pesares, Edgar aumentó de 58.6% en 2016 (259 votos) a
70.4% (297) en 2017, quedando en un cercano quinto lugar detrás de los cuatro que fueron seleccionados: Chipper Jones (97.2), Vladimir Guerrero (92.9), Jim Thome (89.8) y Trevor Hoffman (79.9).

Los 40 nombres que aparecen en la de este año, sin embargo, solo incluyen una clara selección de primera ronda -el estelar relevista panameño Mariano Rivera, de los Yankees- y otro lanzador al que se considera con grandes oportunidades de entrar: Roy Halladay, el dos veces ganador del premio Cy Young que tuvo marca de 188-92 en su carrera y quien pereció en un accidente aéreo a la edad de 40 años el año pasado.
En fin, la mesa pudiera estar servida para que Edgar se una a Clemente, Peruchín, Alomar e Iván Rodríguez y Calderón a Sixto Escobar, Carlos Ortiz, José ‘Chegüí’ Torres, Wilfredo Gómez, Wilfredo Benítez, Edwin ‘Chapo’ Rosario, Félix ‘Tito’ Trinidad, Héctor ‘Macho’ Camacho, Pedro Montañez, Joe Cortez y Cocoa Kid.

El autor formó parte de la redacción deportiva de El Nuevo Día de 1981 a 2008 y es el autor de San-Tito, sobre la carrera de Tito Trinidad y de la novela El último kamikaze, ganadora del certamen del Instituto de Cultura Puertorriqueña en 2016.
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