Aunque lo recuerda con humor, la última vez que jugó en el coliseo Luis Aymat, de su pueblo de San Sebastián, Jackson Rivera, el estelar atacante de los Changos de Naranjito, no disfrutó de un cálido recibimiento.
O tal vez pueda decirse que, en efecto, fue un recibimiento ‘caliente’: “Me trataron de traidor y todo eso”, dijo.
“Yo nací en el hospital de Aguadilla, pero soy natural de San Sebastián y toda la vida he vivido aquí, y tengo muchas amistades”, agregó.
“Pero alguna gente no entiende que esta es mi carrera”.
Sin embargo, el trato recibido el año pasado era comprensible: los Nuevos Caribes de San Sebastiٞán estaban enfrascados en una ardiente serie de campeonato con los Changos, que terminó deteniéndose por contraer Covid varios de los jugadores en diciembre, luego de que los juegos locales de ambos equipos fueran trasladados a canchas neutrales por diversos disturbios con los fanáticos, hasta que Naranjito reaccionó con victorias en los últimos dos juegos.

De esta forma, los Changos, dirigidos por el naranjiteño Jamille Torres, rompieron una sequía de 15 años sin campeonatos y obtuvieron el 24to de la historia, confirmándose, de acuerdo al apoderado Alexis Aponte, como el equipo deportivo que más banderines ha obtenido en Puerto Rico.
Este miércoles 19 de octubre, los Changos visitaron por primera vez en la temporada de 2022 la Luis Aymat de San Sebastián y Jackson no sabía cuál sería el recibimiento que tendrían para él.
Pero lo cierto es que el panorama ahora era muy diferente: mientras que Naranjito y San Sebastián eran claramente las dos máximas potencias en la pasada campaña, este año los dos equipos habían venido galopando por carriles diferentes: Luego de seis victorias seguidas, Naranjito ocupaba el primer lugar con una magnífica victoria en tres sets el domingo ante casa llena en la Gelito Ortega frente a los Plataneros de Corozal, que llegaron a ese juego con cinco victorias en ristra.
Los Caribes, entretanto, tenían marca de 1-6, con cinco derrotas seguidas, y ocupaban la sexta y penúltima posición.

“La realidad es que muchos de los otros equipos han perdido jugadores, por varias razones, y nosotros, por el contrario, hemos traído más”, dijo Rivera, el exintegrante de la selección nacional, quien está jugando en su vigésimoprimera campaña en la Liga Superior.
“Sí creo que tenemos mejor equipo que el de la temporada pasada, porque hemos agregado jugadores como (el central) Enrique Escalante y (el atacante) Eduardo Hernández”.
Estos se suman a un elenco que cuenta nuevamente con el JMV de la pasada temporada, el central Angel Rivera, el opuesto Juan Vázquez y el estelar acomodador Juanmi Ruiz, entre otros.
“Pero también tenemos jugadores más jóvenes, como Luis Vega, y cuando (el libero) José Mulero no podía jugar debido a una situación médica, trajimos a Pedro Cabrera, que es un veterano y ha hecho un gran trabajo”, agregó Jackson.

Rivera, de 35 años, es rutinariamente el mejor anotador del equipo, y fue seleccionado como el Jugador Más Valioso de la segunda semana del torneo.
“Yo sinceramente creo que los mejores años de un jugador es cuando está entre los 31 y 35 años, porque ya cuenta con la experiencia además del talento”, dijo. “De hecho, casi todas las selecciones nacionales tienen muchos jugadores de esa edad, pero en Puerto Rico no es así”
Sin embargo, él no cree que su salida de la selección en 2017 se debiera a su edad.
“Lo que pasó es que entonces empezaron a exigir que los miembros de la selección fueran a entrenar todos los días, y las prácticas eran en Salinas”, dijo.
“Yo les dije que se me hacía muy difícil viajar todos los días desde San Sebastián, donde tengo mi trabajo, pero que podía hacerlo si podía practicar solo los fines de semana”.
Jackson es uno de los dos maestros de educación física que corren el programa de voleibol de la Escuela Especializada de Artes y Deportes Ernestina Méndez, de San Sebastián.
“Pero me dijeron que no podía ser, así que les di las gracias por todo y me fui”.

Ahora, el jugador que jugó internacionalmente en Chipre, Italia y Bahrein, y quien se unió a Naranjito en 2019 luego de haberse desempeñado con Adjuntas, Mayagüez, Guaynabo, Fajardo, San Sebastián y Lares, ganando campeonatos en Fajardo y Guaynabo antes de lograrlo con los Changos, anda en busca ahora del cuarto campeonato de su carrera.
“Viendo las cosas con realismo, yo creo que Naranjito tiene muy buenas probabilidades de repetir como campeón”, dijo.
“Empezamos la temporada perdiendo los primeros tres juegos, cuando nos faltaron algunas de nuestras figuras estelares -como Angel y Juan, que estaban suspendidos-, pero no me gusta usar eso para justificar las derrotas, a pesar de que dos de ellas fueron a cinco sets” dijo.
“Creo que la verdadera razón fue que nos relajamos, nos pusimos muy cómodos diciéndonos que no necesariamente teníamos que ganar porque nos faltaban esos jugadores, y no dimos el máximo esfuerzo”.

“Pero después que llegaron, hemos tenido el equipo completo y sí estamos dando el máximo en cada juego”.
Sin embargo, aclaró, no debe caerse en la certeza de que el campeonato está en el bolsillo.
“Como quiera va a ser complicado”, dijo. “Como somos el campeón, los equipos salen a dar el máximo siempre contra nosotros, noche tras noche”.
En efecto, así lo comprobaron los Changos en su juego en San Sebastián el miércoles 20 de octubre, cuando los Changos tuvieron que recuperarse luego de haber perdido los primeros dos parciales para imponerse con el agua al cuello en cinco sets.

El autor formó parte de la redacción deportiva de El Nuevo Día de 1981 a 2008 y es el autor de San-Tito, sobre la carrera de Tito Trinidad y de la novela El último kamikaze, ganadora del certamen del Instituto de Cultura Puertorriqueña en 2016.
(ceuyoyi@hotmail.com).