Campeones de la Doble A en 2015 y subcampeones en 2016, los Artesanos de Las Piedras comenzaron la temporada de 2017 resueltos a probar que la edición de este año era la más potente de todas, llegando incluso a ocupar el primer lugar en el standing global con marca de 11-1.
Lo curioso era que el equipo lo había logrado sin contar, en gran medida, con su as monticular, Juan ‘Goodbye’ Acevedo, quien desapareció del panorama luego de apuntarse una victoria en su única salida, al no permitir carreras en seis entradas.
Acevedo, quien fue suspendido 10 juegos en la temporada pasada, esta vez, al parecer fue suspendido por toda la campaña por la Liga, que no acostumbra a informar los motivos para sus suspensiones.
“Lo que es seguro es que no va a regresar este año”, es lo único que confirma el gerente general Juan ‘Vaquero’ Sepúַlveda. “Es una baja grande, porque Goodbye es nuestro as, pero por suerte los otros muchachos han venido haciendo el trabajo”.

Yamil Rivera.

De hecho, antes de este fin de semana, el equipo tenía un excelente promedio de efectividad de 3.04, destacándose como abridor, como de costumbre, Milton Joe Velázquez, el dos veces campeón de efectividad de la liga, con marca de 3-1 y 2.35 de efectividad, y el relevista Carlos Gil (3-0, tres salvados y 0.64 de efectividad).
“Pero en realidad ha sido la ofensiva la que ha venido cargando el equipo”.
En efecto, el equipo promediaba .312 con nueve cuadrangulares, liderando el ataque el jardinero izquierdo Waldyván Estrada (.419, 5 jonrones, 17 empujadas).
Y la noticia de que el versáַtil abridor y relevista Yamil Rivera, Jugador Más Valioso de la serie final de 2015, se uniría al equipo este fin de semana, da pie para que los Artesanos fortalezcan aún más su elenco monticular para la postemporada.
Yamil fue a residir y trabajar en Oklahoma y por eso no había lanzado este año, pero se espera que para las series esté viajando todos los fines de semana, dijo Sepúlveda.
Pero las sorpresas siguen aflorando.
Hace par de semanas los Artesanos tuvieron que superar otro acontecimiento inesperado -otra piedra en el camino-, cuando su dirigente, José Geraldo León, aceptó, con el aval del equipo, un ofrecimiento para trabajar como ‘coach’ de liga menor con la organización de San Luis, siendo sustituido entonces por quien era entonces su ‘bench coach’, Gil Martínez.
“Yo no tenía intenciones de dirigir este año, pero acepté venir de ‘coach’ porque José me pidió que lo ayudara y yo no estaba haciendo más nada”, dijo Martínez, quien dirigió a los Brujos de Guayama hace par de año y en la liga invernal es el gerente general de los Gigantes de Carolina.
“Pero he estado aquí toda la temporada, la gerencia ha sido muy buena con nosotros y, viendo la química que hay en este equipo, no podía rechazar el ofrecimiento de dirigir un equipo como este”.
Con Martínez en el mando, los Artesanos han jugado para marca de 2-1 y hoy domingo 30 de abril, con marca de 13-2, antes de que la lluvia interviniera debían visitar a Juncos para tratar de asegurar el primer lugar en la Sección Este con vistas a los ‘playoffs’ seccionales.
No sé, pero un equipo que supera tantos contratiempos y recibe tantas sorpresas capaces de poner a temblar hasta a los bates guardados en el ‘dugout’, puede estar destinado a otra gesta de Grandes Ligas… aunque sea en la Doble A.

El autor formó parte de la redacción deportiva de El Nuevo Día de 1981 a 2008 y es el autor de San-Tito, sobre la carrera de Tito Trinidad. Acaba de publicar su primera novela, El último kamikaze, ganadora del Premio Nacional de Novela del Instituto de Cultura Puertorriqueña.
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