La OMB nada en contra de la corriente
Por segunda vez en meses, los presidentes de tres de los principales organismos boxísticos mundiales celebraron una cumbre la semana pasada.
La misma se efectuó en el estado de Quintana Roo (México), nuevamente por invitación del CMB, y los que participaron fueron el venezolano Gilberto Mendoza (AMB), Daryl Peoples (FIB) y el mexicano Mauricio Sulaimán, quien recientemente reemplazó a su padre, el fenecido José Sulaimán, en el mando del CMB.
El gran ausente, de nuevo, lo fue el puertorriqueño Francisco ‘Paco’ Valcárcel, presidente de la OMB, quien parece estar nadando en contra de la corriente al supuestamente oponerse a fomentar un clima de fraternidad e intereses comunes con las otras organizaciones, las cuales, según han expresado después de sus dos cumbres tripartitas, buscan mejorar el boxeo profesional a nivel mundial.
Entre las propuestas que se han escuchado luego de las reuniones, están las de crear una uniformidad entre las reglas de los tres organismos, unificar títulos mundiales para reducir la proliferación de campeones mundiales en el mismo peso, y hasta de fomentar innovaciones como el uso de ‘replay’ para analizar las situaciones confusas sobre el ring.
De lo último que se habló fue de cambiar el sistema de votación de los jueces, dándoles más flexibilidad al permitirles el uso de medios puntos: es decir, votar 10-9 ½ un asalto demasiado parejo, en vez del obligatorio 10-9 de ahora.
¿Qué puede tener Paco Valcárcel en contra de todo esto, que parecería ser de beneficio tanto para los boxeadores como para los fanáticos, por no hablar de la paz mundial, como sin duda mencionaría una candidata de Miss Universe?
Pues Valcárcel cree que solo se trata de una campaña de relaciones públicas, probablemente ideada para fortalecer el liderato de Mauricio Sulaimán, quien apenas lleva meses en el cargo. Y también está convencido de que pocas o ninguna de las reglas que quieran aprobar van a llegar a puerto seguro.
“Entre las cosas que les dije fue que si en realidad querían reducir los campeones, deberían empezar por eliminar todos esos campeonatos de cobre y platino que tiene el CMB, y todos los subcampeonatos y campeonatos interinos que tiene la AMB”, dijo el veterano abogado y hombre de boxeo.
“De hecho, hace unos años nos reunimos en Dallas, cuando estaba José Sulaimán y Marian Muhammad era la presidenta de la FIB”, agregó. “Discutimos todo eso de unificar y la cosa quedó en nada”.
“Más aún, lo que Sulaimán hizo poco después fue quitarle el título a Timothy Bradley luego de que ganara el título junior welter del CMB siendo campeón de la OMB”.
Y, en efecto, Valcárcel cree que muchos de los cambios de reglas que se están proponiendo -tales como la puntuación y el ‘replay’- también quedarán en nada… por carecer los organismos de jurisdicción sobre ello.
“En Estados Unidos”, afirmó, “el boxeo lo regula la Asociación de Comisiones de Boxeo (ABC en inglés), que es la que impone sus reglas uniformemente a todas las comisiones, más allá de lo que digan los organismos”, agregó.
Y razonó que, por encontrarse en territorio norteamericano, la OMB debe funcionar más a tono con el reglamento de la ABC -y la ley federal sobre el boxeo- que organismos como la AMB y el CMB, que tienen sus oficinas centrales en Panamá y México, respectivamente.
“En Estados Unidos yo ni puedo asignar mis oficiales: solo puedo enviar una lista de 10 nombres, de donde ellos seleccionan”, dijo, a modo de ejemplo.
“Pero yo prefiero trabajar con la ABC, al igual que creo que la ley federal del boxeo es buena”, añadió, “porque prohíbe el conflicto de intereses, como cuando los promotores son manejadores también”.
Sí admitió, sin embargo, que la influencia de un organismo internacional puede ser mayor en otros países: “En Alemania, por ejemplo, yo sí nombro mis jueces”, dijo.
Pero incluso fuera de Estados Unidos, Valcárcel prefiere delegar el máximo posible en los organismos locales.
“En eso del dopaje y cosas así, yo lo que hago es indicarle a la comisión local que tiene que haber dopaje, pero que es responsabilidad de ellos”, explicó. “No creo que un organismo internacional deba inmiscuirse directamente en eso, porque después puede meterse en problemas y quedar expuesto a demandas”.
Pero lo cierto es que tampoco le atraen en modo alguno algunas de las reglas que ya implementan los otros organismos iternacionales, o que están proponiendo ahora, por lo cual le repele el concepto de unificar reglamentos.
“La votación de los jueces solo mejorará nombrando a oficiales honestos y capacitados”, dijo. “La idea del medio punto en la votación por asalto ya se ha usado en Argentina y no ha cambiado nada”.
“Además, ¿qué gano yo exigiendo (como estipula el CMB con sus prepesajes) que los peleadores tengan que marcar un peso determinado un mes o una semana antes de la pelea?” preguntó adicionalmente.
“¿Qué pasa si no hacen el peso? ¿Los sancionan?”
Pues no pasa nada… para variar.
El autor formó parte de la redacción deportiva de El Nuevo Día de 1981 a 2008 y publicó recientemente su primer libro, San-Tito, sobre la carrera de Tito Trinidad.
(ceuyoyi@hotmail.com).