Trump expone el fraude electoral ante las legislaturas estatales
Las legislaturas de varios estados en disputa realizan vistas públicas sobre las irregularidades electorales. Pensilvania, Arizona y Michigan son los primeros estados en realizar las vistas. Esto es importante para la campaña del presidente de EE. UU. Donald Trump, porque son las legislaturas estatales quienes seleccionan a los electores del Colegio Electoral.
Trump participó vía telefónica en las vistas públicas realizadas por las legislaturas de Pensilvania y Arizona. Los abogados de su campaña y decenas de testigos expusieron las irregularidades electorales y revelaron la evidencia recopilada. Participaron observadores de colegio que emitieron declaraciones juradas, expertos en análisis estadístico y matemático, entre otros ciudadanos.
Se demostró que hay muchas imposibidades matemáticas y obstrucción a la labor de los observadores de colegio. Además, se denunció las violaciones constitucionales realizadas por funcionarios de la Rama Ejecutiva.
Estas revelaciones asustaron a los administradores de Twitter. Por eso, suspendieron la cuenta del senador estatal de Pensilvania, Doug Mastriano. El presidente Trump lo denunció mediante un tuit, lo que provocó críticas y la reactivación de la cuenta. Mastriano es el senador más vocal en las denuncias sobre fraude electoral y es quien propone que los legisladores estatales seleccionen a los electores del Colegio Electoral. La Legislatura de Pensilvania delegó esa función en el gobernador, pero puede retomarla cuando desee.
La estrategia de la campaña de Trump es demostrar que hubo fraude electoral ante las legislaturas estatales dominadas por republicanos para que seleccionen a electores del Colegio Electoral favorables a la reelección del presidente de EE. UU o para que no certifiquen las elecciones presidenciales. De este modo, Trump puede obtener los 270 votos electorales que necesita o puede impedir que el candidato presidencial demócrata, Joe Biden, los obtenga. Si ninguno de los candidatos llega a los 270 electores del Colegio Electoral, la Cámara Baja federal puede seleccionar al presidente de la Nación mediante una votación en la que cada estado tiene solo un voto. Debido a que hay más estados republicanos que demócratas, Trump tendría ventaja.
Estas acciones van a la par con las demandas radicadas en tribunales de estados en disputa, las apelaciones en cortes de circuito y el objetivo de ir en alzada hasta llegar al Tribunal Supremo federal. La campaña de Trump batalla en varios frentes, en la Rama Judicial y en la Rama Legislativa. También, lucha para contrarrestar la censura de los grandes medios de prensa y de los administradores de redes sociales. Además, presiona para que la Rama Ejecutiva estatal y federal investigue el fraude electoral.
El Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) es una de las agencias ejecutivas que comienza a investigar. Solicitó la evidencia recopilada sobre irregularidades electorales y fraude. Trump no confía en las manzanas podridas que laboran en esta agencia, pero considera que es necesario que se realice una investigación.
Hay varias vías para que Trump exponga el fraude electoral y sea reelecto como presidente de EE. UU. En seis estados en disputa (Wisconsin, Michigan, Pensilvania, Georgia, Arizona y Nevada) ocurren varias de las siguientes actividades: vistas públicas de las legislaturas estatales, demandas y apelaciones en tribunales, recopilación de evidencia adicional, manifestaciones para denunciar el fraude electoral, recuentos, auditorías de máquinas de votación y de material electoral, entre otras.
No serán los medios de prensa quienes decidan quién ganó la elección presidencial. Hay un proceso constitucional diseñado por los fundadores de los EE. UU. que atiende los casos anómalos de disputas electorales. Los tribunales, los legisladores estatales y los congresistas forman parte de los contrapesos establecidos para confirmar al presidente de la Nación. Queda esperar por el desenlace.