Lo más hermoso de la vida es ser agradecido con la vida y la oportunidad de poder estar vivo y disfrutar de los tuyos y contemplar la belleza de un amanecer hermoso en nuestra Isla. Sabemos todas las situaciones económicas y sociales que están pasando en Puerto Rico. Sin embargo, nuestra fe y esperanza debe permanecer intacta. Les explico de la manera que he aprendido a ver la vida y poder disfrutar sin perder de perspectiva la realidad.

Hace cuatro años atrás, me levantaba todos los días a correr antes de las seis de la mañana. Es costumbre de los corredores en San Juan, cuando se dirigen hacia el Morro, llegar hasta la puerta y tocarla. Puede ser por buena suerte… no sé, pero así lo hice por muchos años. Luego de tocar la puerta, cuando venía de regreso, alzaba mis brazos y daba gracias a Dios por darme salud, permitirme correr y poder hacerlo en esta Isla tan hermosa con un clima excelente para poder correr durante todo el año. Lo más hermoso era poder apreciar en ese momento el amanecer y el mar… inhalar y exhalar con el espacio para pensar en lo afortunada que era de poder apreciar mi Isla. Me daba fortaleza para tener un día exitoso y alegre, además que los pensamientos fluyen mejor. Ciertamente, todos tenemos situaciones familiares, laborales, emocionales, etc., que a veces nos quitan la paz. Está en ti saber la manera de visualizarte de una forma positiva.

Hoy día no puedo correr y llegar antes de las seis o siete de la mañana hasta la puerta del Morro. Pero si puedo despertar temprano y poder apreciar un amanecer hermoso en nuestra Isla y darle Gracias a Dios por estar viva y poder disfrutar de mi familia, de vivir en este País con un clima extraordinario que me permite salir y respirar aire fresco, lleno de energía positiva. Amigo, amiga que lee mi post, yo también tengo problemas. Sin embargo, veo todo lo positivo que Dios me ha dado en la vida y lo que no es positivo, trato de visualizar lo que puedo aprender de esa situación para mejorar mis pensamientos y acciones. Por eso, trato de levantarme temprano, disfrutar de un hermoso amanecer y llenarme de esa energía positiva que me ofrece Dios todas las mañanas. Además, en la medida que pueda ayudar a otros me hace sentir mejor ser humano.

A través de las carreras que organizo que son temprano en la mañana, trato de transmitir todo ese aprendizaje hermoso que he tenido la oportunidad de vivir y de alguna forma reciprocar.

Así que no es hacerte de la vista larga a tus situaciones personales, es ver la vida desde otra perspectiva. De una forma positiva. Hay maneras simples de llenarte de fortaleza y energía positiva. Tú decides el matiz que le das a tu vida.