Lo había advertido en una de las primeras entradas de este blog: todas las personas valen y se respetan, sin importar su condición física, emocional o mental.

Insistí en el uso del vocabulario correcto al referirse a las personas con impedimentos, tomando como punto de partida un documento de la organización SER de Puerto Rico. Antes, se plasmó en forma contundente en dos entrevistas y en un reportaje/retrato a Glidalis Montañez, publicado en la Sección “Vidas Únicas” de este periódico.

La entrevista de la “Vida Única” de Glidalis –una mujer que nació con la condición de Focomelia Total- fue contundente. Su cuerpo no tiene los huesos de las 4 extremidades. Y, vamos a hablar claro y sin adornos: Gli mide 3 pies de estatura y no tiene brazos ni piernas. Tiene manos chiquititas y dedos redondos, que –según ella dice – parecen dulces M&M.

Tiene además, la capacidad intelectual que muchos quisieran. Ha sido profesora universitaria y conferenciante. Pero también tiene un genio endemoniado.

Cada vez que surge la oportunidad, recalca que no existen “los inválidos”, o personas que no valgan; que en nuestra sociedad hay personas con impedimentos (PCI) específicos. O sea, personas ciegas, personas sordas, personas con Síndrome Down, personas con parálisis cerebral, personas con espasticidad en las cuatro extremidades, personas con hemiplejia, personas con paraplejia, personas con cuadriplejia, o personas con Focomelia Total, entre tantas otras.

A continuación un “pensamiento” que publicó recientemente en los “muros” de féisbuc de varias personas, incluido el mío:

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“Me cucaron los dedos y aquí va mi pensamiento: 

“La portada de hoy (12 de junio del 2015) del periódico Primera Hora (con el titular “Quema vivo a joven inválido”) me enervó la sangre y me recordó la manera de pensar de los que no tienen cerca a una persona con impedimentos y la forma en que muchos nos miran.

Por otro lado el sensacionalismo y las formas que buscan para vender definitivamente llegaron más allá del límite y para completar faltan el respeto a una población a la que orgullosamente pertenezco: PERSONA CON IMPEDIMENTO (PCI), con el respeto de los que no me consideran de esta manera, tengo que levantar mi voz por quiénes muchas veces no se atreven a hacerlo. 

1) El minusválido es quién quemó a la persona con impedimento.
2) No se dice minusválido (les dejaré de asignación la forma correcta de decirlo).
3) Ya es hora de respetar lo que nosotros como PCI sentimos. No sólo nos hieren a nosotros, también hieren y faltan el respeto a nuestros padres, familia y amigos.
4) Estamos en el 2015 ya es tiempo de dejar de estar clasificando y menospreciando a una población que no pidió tener sus condiciones, al contrario cada condición es una bendición y fuimos elegidos por ese ser llamado Dios; porque cada uno de nosotros tenemos una misión en esta vida.
5) Las palabras: confinados, lisiados, mongoloide, inválido están MAL usadas (otra asignación).
6) Antes de escribir y hablar: PIENSEN
7) Me acerqué muchas veces a la Asociación de Periodistas de Puerto Rico (ASPPRO) para darles un taller de estos temas y no siguieran cometiendo los mismos errores y horrores, pero hasta el sol de hoy a ninguno de los presidentes les ha interesado mi acercamiento.
8) A todos mis amigos periodistas los respeto y quiero mucho; pero en esta no puedo hacerme de la vista larga.
9) Exijo respeto hacia nosotros, nuestros padres, familia y amigos; el día en que se encuentren en nuestros zapatos entenderán.
10) Hasta el día que me muera estaré defendiendo nuestros derechos y seguiré diciendo “el impedimento sólo está en la mente de las personas”.

Soy feliz y bendecida con mi Focomelia Total, mis 3 pies de estatura, con las murallas que me han puesto en el camino, pero sobre todo con cada experiencia positiva vivida.

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Los que la conocemos, sabemos que sus palabras son genuinas, como genuina es su alegría de Vivir. ¡Gracias Glidalis!