María de Lourdes Santiago lo hizo muy bien en el debate del miércoles porque al repudiar la agresión antidemocrática de la Ley Promesa y su Junta Imperial estableció muy claramente que la INDEPENDENCIA de Puerto Rico era la única alternativa que remediaba ese abuso imperialista. Curiosamente, Alexandra Lúgaro, también independentista, compartió honores con María de Lourdes.

Argumentar en favor de colaborar con la Junta de Control Fiscal no solamente es indigno y nos degrada, sino que nada resuelve en favor de los puertorriqueños y solo asegura la continuidad del sistema colonial. Al Partido Popular decidirse por ‘ bregar’ con la Junta Imperial, renuncia a cualquier alternativa descolonizadora (¿dónde rayos están los soberanistas?) y se unen al PNP en un ‘menage de trois’ difícil de justificar, ideológica y electoralmente.

Votar por la INDEPENDENCIA el 8 de noviembre es golpear a los imperialistas y obviamente una manifestación de amor propio y respeto por nuestra patria. Y los colonizados y los pitiyanquis nada tienen que temerle al voto independentista en el 2016 porque no vamos a ganar. Nuestro gran propósito en estos comicios es CRECER para convertirnos en una fuerza electoral capaz de ejercer una influencia importante en la gobernanza de nuestro Puerto Rico y de esa manera, romper la hegemonía asfixiante que han mantenido los partidos colonialistas sobre nuestro pueblo por más de un siglo

Además, ¿quién gobierna bajo el yugo de una sindicatura?

Mientras los vientos de campaña suben y bajan de intensidad, la resistencia a la Junta de Control Fiscal se hace patente en las calles y dondequiera que aparezca este grupo de cobradores.

QUE SE VAYAN les decimos los independentistas preparándonos para una demostración de fuerza el 8 de noviembre en unas elecciones generales que tendrán mucho de plebiscitarias. Así como lo leen.

Si algo desafía explicaciones es la actitud mezquina asumida por el presidente Barack Obama hacia Puerto Rico y los puertorriqueños Y pensar que fuimos un factor en su ascenso a la presidencia. Pero si indiferente ha sido a nuestros problemas desde que debutara en el 2009 la verdad es que botó la pelota del maltrato en su segundo cuatrienio de mandato. Insensible al dolor de nuestra gente que sufre el encarcelamiento de Oscar López Rivera asume la postura de no importarle un comino la crisis humanitaria que nos amenaza ante una deuda que nos es impagable y por la cual gobierno yanqui rehúsa responsabilizarse en alguna medida dado el que nos han sometido al crimen del coloniaje por 118 años.

Para colmo, parece mentira que un Obama profesor de derecho constitucional se atreva a firmar una Ley como Promesa en la que de jure y de facto sustituye la autoridad de una oficialidad electa por los puertorriqueños y la pone en manos de siete personas desmantelando así lo que queda de gobierno democrático en nuestra Isla.

Nadie mejor que el juez federal Juan Toruellas para denunciar públicamente semejante atropello que nos degrada y nos humilla a la vista de todas las naciones del planeta.

Siempre habrá puertorriqueños dispuestos a exculpar a esos abusadores, los mismos que por medio siglo estuvieron destruyendo el ambiente paradisiaco de Vieques y Culebra con la porquería que allí dejaron sus maniobras militares mientras agobiaban nuestra economía con leyes federales como las de cabotaje.

QUE SE VAYAN y nos dejen forjar nuestro destino en paz.

Y nosotros, esta vez, vamos a resistir y en noviembre a votar por la INDEPENDENCIA de Puerto Rico en lo que será el principio del fin del coloniaje en nuestra patria.