Por años, Puerto Rico ha fallado en no integrar a su plan de desarrollo económico una estrategia agresiva que contemple las múltiples oportunidades que representa la región de América Latina.
Afortunadamente,  eso ha ido cambiando poco a poco, y hoy día,  se habla de misiones comerciales, alianzas y pactos bilaterales con países como Guatemala, como reseñamos en nuestra edición impresa de Negocios de El Nuevo Día.  La mirada hacia América Latina hace todo el sentido del mundo para Puerto Rico, toda vez la mayoría de las economías que integran el Cono Sur y Centroamérica proyectan crecimientos importantes durante el año que apenas comienza. 
Guatemala, por ejemplo, pronostica un crecimiento de 4% para este 2014, según el más reciente informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL).
Otras economías, como las de Panamá, proyectan crecimientos a la altura del 7%, mientras que países como Bolivia, Perú, Nicaragua y nuestra vecina  República Dominicana esperan crecer sobre un 5% durante este año, según se desprende del mencionado informe.                                                                  Si bien algunas empresas puertorriqueñas,  por años, han embarcado exitosamente en diversos proyectos e iniciativas empresariales a través de la región,  es hora de que Puerto Rico  como país vea en América Latina una parte integral de su estrategia para crecer.
Considerando los retos fiscales y demográficos  que enfrenta nuestra Isla, la mirada al sur como socio para crecer no es opción, más bien es una ruta obligada.