Buen contrato, buen equipo y un dirigente que confía en sus habilidades son los perfiles de una temporada exitosa que se anticipa para José Juan Barea en la NBA a partir del 28 de octubre.

Lo que pueda lograr el mayagüezano en esta campaña con Dallas, dependerá de que pueda mantenerse saludable. Cero lesiones. Si juega o no juega como regular, no es tan importante para él en un equipo donde su dirigente, Rick Carlisle, lo considera valioso lo mismo empezando que viniendo del banco. Eso es clave en la carrera de cualquier baloncelista profesional, porque el dirigente muchas veces determina los éxitos de sus jugadores.

Hablando con José Juan el jueves por la noche, que le dieron libre para mantenerlo descansado, me habló muy bien del centro Andrew Bogut.

“No es un anotador, pero además de ser bueno ‘gardeando’, estabiliza la ofensiva porque pasa bien y es inteligente”, dijo Barea.

Sus palabras me recordaron a Pau Gasol, a quien considero el mejor centro en la NBA. Claro, Gasol añade una buena ofensiva a la ecuación.

Al preguntársele sobre el cuadro regular, me mencionó a Deron Williams, Wesley Mathews en la 2 y Harrison Barnes en la tres. Bogut sería el centro con el veterano Dirk Nowitzki en la cuatro. Y creo que serán muchas las veces que Barea será el armador y Williams será su escolta. Del banco, vienen Devin Harris y el hermano de Stephen Curry, Seth Curry. Dwight Powell se perfila como una buena reserva.

Raymond Felton se fue para los Clippers, y esa es una baja ofensiva porque jugó bien el año pasado.

José Juan se siente en mejor condición física que cuando jugó con nuestro Equipo Nacional en el repechaje, y está muy consciente de que no puede lesionarse en este momento en el que se le presenta la oportunidad de tener la mejor temporada de su carrera profesional en la NBA.

En cuanto a la posibilidad de que los Mavericks lleguen al “Baile de Coronación”, ya ese es otro cantar; pero estaremos siguiendo muy de cerca las actuaciones del puertorriqueño Barea y sus Mavericks.