De la onda festiva de Halloween pasamos hoy y mañana al Día de los Muertos y Día de los Santos, respectivamente. En países como Mexico existe una fuerte tradición de celebrar la muerte como parte de la vida con una sana actitud, mezcla de burla y respeto ante “la inevitable”. ¡Por que no, si la muerte es lo mas natural de la vida! Y en tantas partes del mundo hay personas que también aprovechan el misticismo de las fechas para visitar y entablar comunicación con sus muertos. Todo esto esta muy bien y cada quien es libre de hacer su voluntad, siempre que no haga daño a nadie. Solo les quiero hacer una advertencia: cualquiera que sea el método que utilicen para comunicarse con sus seres queridos fallecidos, ¡no utilicen la Ouija!

La Ouija es una tabla aparentemente inofensiva que actualmente se vende en establecimientos comerciales como un juguete mas. No lo es; no es inofensiva. Aunque no se entiende completamente la razón por la que causa efectos inquietantes en sus participantes, lo cierto es que hasta la fecha la forma rectangular, la disposición de las letras y la plancheta que con los dedos de los participantes se va desplazando por la superficie de la tabla para alegadamente  revelar el mensaje de los espíritus, ha demostrado ser un portal para que entren influencias indeseables.

Por que ocurre esto? En primer termino por el protocolo que se sigue al comenzar la sesión de comunicación con los espíritus. Se comienza cada sesión preguntando si hay algún espíritu que quiera comunicarse. Esta inocente pregunta abre la puerta a que cualquier clase de influencias entre. Como nos ocurre en el mundo físico, es como si dejáramos la puerta de nuestra casa abierta para que entre cualquiera y sin control. Nunca se nos ocurriría, no? Pues eso es lo que sucede con este juego.

Los jovenes son los mas adeptos a jugar con la Ouija porque les atrae el reto de saltarse las reglas y probar que son capaces de descubrir algo extraordinario. Y son los jóvenes, precisamente, los mas susceptibles de  caer como víctimas. Se pueden sugestionar con los mensajes que supuestamente reciben y la experiencia les puede afectar psicológicamente. Las propias psiquis individuales de los participantes, sobre todo si se trata de jovenes adolescentes o pre adolescentes, se entremezclan para producir el fenómeno de la comunicacion con lo que ellos consideran que son espiritus del mas allá (y mas bien pudieran ser sus propios subconscientes), y el resultado pudiera traerles perturbaciones mentales.

En resumidas cuentas: no jueguen con la Ouija a menos que la sesión este dirigida por una persona bien versada en el mundo espiritual que ejerza el control. Y si pueden prescindir de ella, mejor. ¡No abran puertas que luego no podrán cerrar!

Se los recomiendo con amor.

La Hora Magica con Virginia Gomez – Ciencia y Espiritualidad ®