¡Se acabó el pan de piquito! No son solo los niños los que están ansiosos con el regreso a clases, sino muchos padres a los que la vida se nos complica con el típico ajoro escolar, el cual implica una infinidad de asignaciones diarias y proyectos especiales, así como los corre y corres por las mañanas para lidiar con el usual tapón mañanero y llegar temprano a la escuela con el mejor ánimo posible para estimular a los estudiantes a adoptar una actitud positiva en el salón de clases.

Luego de casi tres meses fuera de la escuela, llegó la hora de retomar la ruta del aprendizaje, la que, en mayor o menor grado, se complica incluso desde los grados primarios, escalando a medida que el estudiante va pasando de nivel.

¿Qué hacer para ayudarlos y ayudarnos en este inevitable proceso?

PBS parents, una página cibernética que brinda información sobre el desarrollo del niño, ofrece varios consejos, uno de los cuales me pareció el mejor de todos. “Manténganse conectados con la naturaleza”, sugieren al recalcar que el regreso a clases no tiene que implicar el limitar o ponerle freno a actividades divertidas en el exterior.

¡Cuántos no aprovechamos los días de verano para disfrutar en familia en la playa, el parque, el campo y otros escenarios naturales, lejos del bullicio de la ciudad!

La Universidad del Estado de Carolina del Norte enumera una serie de beneficios que los niños reciben cuando se conectan con la naturaleza. Además de ayudarlos en su desarrolo intelectual, emocional, social, espiritual y físico, menciona cómo estas salidas y juegos al aire libre apoyan la creatividad y solución de problemas, mejoran la capacidad cognitiva y el rendimiento académico del menor.

Fomentar y aumentar la actividad física, advierten, reduce los síntomas del trastorno de déficit de atención, mientras que mejora la nutrición, la visión, las relaciones sociales y la autodisciplina. Por último, establecen como esa unión con la naturaleza induce a una reducción del estrés. ¡Y qué gran ayuda le hace todo esto no solo a los niños sino a los adultos!

Sí, ahora en agosto retomamos la carrera escolar que dejamos atrás en mayo, pero eso no significa que no podamos hacer un balance importante entre los estudios y mantener la diversión y la relajación familiar con paseos al aire libre, excursiones y salidas fuera del hogar. La naturaleza es nuestra aliada y siendo Puerto Rico una bella isla tropical los escenarios nos sobran.

¡Hablamos pronto!