Llevaba años pensando hacerlo, pero por una razón u otra, no me atrevía convertirlo en realidad. Luego vino la gran pregunta, ¿de dónde saco el tiempo? Pero la idea seguía en mi cabeza, y la petición también. Fueron varios los editores que me lo pidieron. Y bueno. Llegó el día.

Hoy me estreno como bloguera de El Nuevo Día. Mi intención es, a través de este espacio, compartir anécdotas, vivencias y observaciones que entrelazaré con una de mis pasiones, el tema de la salud. Mi interés es que esta sea una conversación semanal con ustedes y que pueda nutrirme también de su retroalimentación. Para los que no me conocen, les cuento un poco de mí. Soy reportera de este periódico hace unos cuantos añitos [;-)], principalmente del tema de la salud, una de las razones por la cual pretendo expandir por aquí mis aportaciones a este asunto que considero de vital importancia. Cuando no estoy en estos lares, me dedico en cuerpo y alma a mi razón de vivir, mis dos hijos, a quienes amo con locura, cuido y crío junto a su padre, mi media naranja. Madre, esposa, hija, hermana, tía y madrina son algunos de los sombreros que visto a diario, compaginando mis dos pasiones: mi familia y el periodismo. Entre esa carrera diaria es que se darán nuestras conversaciones. Los invito a seguirme en este nuevo espacio, Deshojando Margaritas.

¡Hablamos pronto!