Primero estarán el viernes en San Juan, los precandidatos presidenciales Hillary Clinton, demócrata, y Marco Rubio, republicano.

Van a recaudar fondos, claro está, y a avivar a sus tropas, lideradas en Puerto Rico hasta el momento, en ambos casos, por cabilderos.

Clinton, además de su evento de recaudación de fondos, tendrá una mesa redonda sobre la crisis fiscal y de salud pública, a partir de las 4:15 p.m. en el Centro Cardiovascular del Caribe.

Rubio, quien ha tenido previsto un evento de recaudación de fondos para el mediodía en el restaurante Antonio del Condado, ha anunciado un mítin en el restaurante Aire Libre de Santurce, a partir de las 2:00 p.m..

Muchas preguntas deben estar dispuestos a contestar sobre sus posturas en torno al status político de Puerto Rico, la crisis fiscal (incluyendo la de la industria de la salud), las normas federales de cabotaje, la limpieza de Vieques y Culebra, y la petición de clemencia del prisionero político Oscar López Rivera, entre otros asuntos.

Ambos aspiran a dirigir la política pública del Ejecutivo federal a partir de enero de 2017 y desde ahora deben dar explicaciones claras.

Tres días después, sin embargo, estará en Puerto Rico el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo, quien ha anunciado su viaje como un esfuerzo de “solidaridad” con la Isla.

Cuomo ha pedido a la presidenta del Concejo Municipal de Nueva York, Melissa Mark Viverito, a la congresista demócrata Nydia Velázquez,  y al presidente del condado de El Bronx, Rubén Díaz, hijo, que formen parte de su delegación.

Va a tener un almuerzo con el gobernador Alejandro García Padilla, a quien describe como su amigo y quien fue a respaldarle en las elecciones de 2013 en Nueva York.

Distinto a Clinton y Rubio (quien puede influenciar directamente desde ahora si quisiera), Cuomo no está en la esfera federal, desde la cual que se limitan los espacios de acción del gobierno de Puerto Rico.

Pero, como Clinton, Cuomo tiene una excelente relación con Wall Street. Se le considera más cercano que la exsecretaria de Estado a muchos multimillonarios que dirigen o controlan fondos de cobertura, los llamados fondos buitre. (Una de las primeras manifestaciones públicas en Nueva York que aludió a la crisis fiscal en la Isla, fue de activistas que protestaron en julio un evento de recaudación de fondos organizado por ejecutivos de fondos de cobertura, a $5,000 por cabeza, a favor del comité electoral de Cuomo).

Ahora que estará en San Juan, Cuomo – ya con un ojo en su campaña de reelección – puede explicar también “cuánta solidaridad” le ha solicitado a sus amigos inversionistas para ayudar a la Isla a suavizar su crisis fiscal y de deuda pública.