Tachan a Trump
Pese a los autobombos del presidente Donald Trump, la encuesta del Washington Post ha corroborado la mala percepción que han tenido las respuestas al huracán María que han dado en la isla los gobiernos de EE.UU. y Puerto Rico, así como la desesperante emergencia que la gente vivió.
Solo un 15% de los 1,500 residentes de Puerto Rico entrevistados por el diario – como parte de un proyecto llevado a cabo en conjunto con la fundación Kaiser-, elogió el desempeño de Trump. En el caso del gobernador Ricardo Rosselló, el porcentaje de aplausos se quedó en 31%.
Los gobiernos federal, puertorriqueño y municipales no cumplieron con las expectativas de los residentes de la Isla, de acuerdo a la encuesta. Pero, entre todos, es el gobierno central de Puerto Rico el que obtiene peores notas.
Horas después de la publicación de la encuesta, Trump comenzó a enviar los tuits en los que ha cuestionado el estimado oficial de muertes. El jueves, Trump dijo que el estimado de 2,975 que es producto de una investigación del Instituto Milken de Salud Pública de la Universidad George Washington (GWU) era una invención de los demócratas. Anoche, cuestionó que el gobierno de Puerto Rico no pudiera contar bien los muertos.
Los demócratas han dicho por meses que el huracán María se convertiría en el Katrina de Trump. Y a 50 días de las elecciones legislativas de EE.UU., que pueden dejar a los demócratas con la mayoría, por lo menos de la Cámara de Representantes, Trump trata de difuminar los efectos políticos de la catástrofe ocurrida en la Isla.
La encuesta del Washington Post hace más que enjuiciar la ineficiente respuesta de los gobiernos de Estados Unidos y Puerto Rico. Es una corroboración de la grave crisis humanitaria que vivió la isla durante meses.
Estos datos son un reflejo de la calamidad a la que se enfrentaron los boricuas de la isla:
-La mitad de los entrevistados indicó que tuvo limitaciones para tener acceso a agua.
-Una cuarta parte afirmó que durante la emergencia tuvo problemas para conseguir comida.
-Dos tercios señalaron que sus viviendas fueron dañadas.
-El 62% de los entrevistados solicitó ayuda de FEMA.
-Al 45% de los que la solicitaron asistencia de FEMA le fue rechazada.
-El 16% de los entrevistados señaló que tiene acceso limitado a servicios médicos
En algún momento el presidente Trump ha pensado que las penurias vividas por los puertorriqueños de la Isla se trata de una de una lucha política con los demócratas, de cara a las legislativas.
Anoche, sin embargo, Trump enfiló sus cañones en contra del gobierno de Puerto Rico, al considerar que toda la controversia sobre las muertes causadas por el huracán María se debe a la incapacidad del gobierno de Puerto Rico para contar sus muertos.
Citando al comentarista Lou Dobbs fue más lejos y afirmó que la administración de la isla es una de las “más corruptas” de una jurisdicción federal.
Hace unos días, Trump exhortaba a los medios estadounidenses a corroborar con el gobernador Ricardo Rosselló su “éxito increíble” al responder a la catástrofe. Anoche, utilizando a Dobbs, alentaba la idea de que el gobierno de Puerto Rico es uno de los más corruptos bajo la bandera estadounidense.
Se cierra el margen para tratar de apaciguar al presidente. Trump, sintiéndose acorralado en el debate, no se ha limitado ahora en sus críticas a la alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, quien dio la voz de alarma durante la emergencia, sino también ha querido enjuiciar el desempeño del gobierno de Puerto Rico.
Pero, en medio del desdén con el que trata a Puerto Rico, Trump ha perdido de perspectiva que frente a la tragedia que dejó el huracán María no son las voces de los demócratas o del gobierno puertorriqueño las que le persiguen.
Lo verdaderamente importante son las voces de los puertorriqueños que vivieron la emergencia, los que en la encuesta del Washington Post, apretando con fuerza el marcador, tachan su trabajo.
*El estudio fue realizado entre el 3 de julio y el 20 de agosto pasado, por medio de 1,500 entrevistas a personas residentes de la isla, que vivieron la experiencia del huracán María. La encuesta tiene un margen de error de 3.5%.