C.E.L.A.C.
Se trata de la Comunidad de Estados Latinoamericanos ydel Caribe y para los puertorriqueños, es una desgracia el no haber sido invitado Puerto Rico a compartir con lostreinta tres países hermanos que se reunieron esta semana en La Habana, Cuba.
La ausencia de Puerto Rico en esa tercera cumbreregional, la primera se celebró en Venezuela y la segunda en Chile, se explicóen algunos medios noticiosos como que a nuestro gobierno ” no leinteresa” formar parte de este organismo que, obviamente, pretende ser unaalternativa a la Organización de Estados Americanos, tan desprestigiada por elcontrol que , sobre ella, han tenido los Estados Unidos.
La verdad monda y lironda es que el Estado Libre Asociadono nos acredita como país soberano e imposibilita, por reglamento, nuestra membresía. En CELAC, los EstadosUnidos quedan excluídos por definición. –
Las gestiones de nuestro Secretario de Estado DavidBernier para “internacionalizarnos” económicamente con naciones culturalmente afines no solo nohan pasado desapercibidas sino que se han considerado favorablemente por lainmensa mayoría de los puertorriqueños. Y no ha sido de fácil implementación suproyecto con las limitaciones que nosimpone la ‘territorialidad’ política que no atendió la Ley 600 y no subsanó nila constitución del ELA ni el tan mentado pacto de asociación de 1952.
Claro que le convendría a Puerto Rico formar parte deCELAC. Habría que ser ignorante y poco inteligente para pensar lo contrario. Lomismo aplicaría para pensar que no nosconvendría aceptar el ofrecimiento de venta barata de petróleo que nos haríaVenezuela. Es precisamente en tales situaciones que aflora la deshonra y loincapacitante de nuestra realidad colonial.
Algunos anglófilos, sean pitiyankis o superdemócratas, seofenden por el hecho de que esta tercera cumbre de CELAC se haya celebrado enCuba. Se valen de argumento tal para tratar de viciar de pura politiquería elverdadero gran propósito de este concierto de naciones latinoamericanas. Sinembargo, nada dijeron los yankistas cuando la segunda cumbre se hiciera en elChile donde los Estados Unidos liquidaron a Salvador Allende promoviendo ladictadura de Pinochet y donde por los últimos años ha prevalecido un gobiernode derecha, el mismo que acaba de serderrotado en la últimas elecciones de esa república.
Si algún país ha patrocinado dictaduras en la AméricaLatina con angelitos como los Somoza, Stroessner, Pérez Jiménez, Rojas,Trujillo , Duvalier etc. ese ha sido Estados Unidos. Y es que, como tantasveces he repetido en mis escritos, una cosa es el pueblo ‘americano’ y otra esegobierno yanki manejado por el monstruoso complejo militar industrial; ese queevoca y le rinde pleitesía a la libertad con propósitos imperialistas.Arropados con el manto de ” Freedom and Democracy” los imperialistasdan rienda suelta a su codicia y su fuerza militar para multiplicar su riquezay así mantener su hegemonía mundial.
Los Estados Unidos se vanaglorian de ser paladines de lalibertad y la democracia pero su historial de intervenciones violentas enpaíses latinoamericanos ( y en medio mundo) desmienten esas pretensiones y nohay mejor prueba de su mendacidad que el haber invadido a Puerto Rico en 1898con el único propósito de convertirnos en una colonia al servicio de susintereses geopolíticos.
De manera parecida, han ultrajado la soberanía de docenasde países latinoamericanos, siempre con el pretexto de ‘protegerlos’ deregímenes anti democráticos y dictatoriales. Asi propiciaron derrocamientos degobiernos constituídos democráticamente como el de Bosch en Dominicana y,Allende en Chile y siga usted por ahi llegando al colmo del abuso cuandoinvadieron a la minúscula Grenada. Y claro, en Cuba, no solamente la de FidelCastro sino la de sus títeres como Batista. alli mantuvieron y mantienen elenclave de Guantánamo, made in USA.
En protesta de toda esa porquería imperialista y bajo elliderato de la izquierda latinoamericana se organiza CELAC en lo que podríacalificarse como una segunda etapa dela lucha por la independencia de 58 millones de americanos del sur y delcaribe; hombres y mujeres que claman por el derecho de vivir en paz bajo elsistema económico y forma de gobierno que mejor responda a sus intereses y noal de Washington.
América Latina no puede seguir siendo “el patio” del TíoSam.
De todo eso se trata CELAC. Como latinoamericano y puertorriqueño, meaverguenzo de que Puerto Rico no pueda ser parte integral de este movimientolibertador.