“¡Disculpa, pero te estoy hablando a ti! ¿Oíste lo que te dije?” Cuåntas veces nos han llamado la atención así o hemos visto cómo le pasa a otra personas en medio de una reunión de trabajo o de una conversación entre amigos o familiares. Y no es que nos aburramos con lo que se estå hablando (que también puede ser el caso ….), es que a la mínima, nuestra mente vuela a un sueño que estamos forjando con los ojos bien abiertos.

Por ejemplo: sueñas con un empleo que te fascinaría conseguir, montar un negocio, vivir en otro pais, ganar una competicion deportiva, casarte con esa persona especial … La lista es tan larga como nuestros deseos de vivir una vida de película.

Las personas que visitan su mundo de fantasías no necesariamente lo hacen para escapar de la vida real. Si fuera así y todo el tiempo, la persona debe consultar un problema de salud mental. No. Me refiero a ese sueño, a ese proyecto “estrella” que llevas dando forma en tu imaginación y cada vez te sientes mas a gusto con el. “Soñar despierto” tiene mala fama porque vivimos en una sociedad obsesionada con la productividad y se paga al empleado para que produzca resultados que a su vez traigan dinero a la empresa. Por eso el tiempo que dedicamos a “fantasear” se considera perder un “tiempo que vale oro”. Y a los niños en la escuela les ocurre igual. Es un error, pero debemos establecer las diferencias.

Nuestra sociedad occidental ya esta empezando a entender (ciertos sectores como las grandes multinacionales tecnológicas en Sillicon Valley, California, por ejemplo), que cada sueño despierto es la base de una creación que se esta desarrollando en la imaginación de la persona y en su habilidad para “conectarse” con fuerzas multidimensionales para hacerla viable y exitosa. Y es que para que algo se materialice en la realidad, debe crearse primero en la mente. El pensamiento siempre precede a la acción  Es regla de oro. En resumidas: ¡Soñar despiertos nos hace mas creativos y productivos! Salvo que tu trabajo sea puramente mecánico y requiera de una precisión e higiene perfectos (ensamblas equipos electrónicos muy controlados), cualquier profesión creativa exige procesos de ensoñaciøn, silencio y desconexión de la realidad inmediata.

Ventajas de soñar despiertos

1. Nos relaja para dominar mejor nuestros actos.
2. Exploramos mas opciones para resolver problemas.
3. Aumentamos nuestra habilidad para tomar decisiones y entender la mentalidad de otras personas.
4. Aumenta nustra productividad porque vamos directo a probar lo que ya ideamos en la mente.
5. Enfocamos mejor los resultados. 
6. Reafirmamos nuestra autoestima y la seguridad en nuestra ética y principios (sabemos hasta donde estamos dispuestos a llegar para lograr nuestro sueño).
7. Evitamos aburrirnos en una situación tediosa o desagradable. Con poner el “piloto automático”, seguimos soñando despiertos y nadie lo nota.

Recordemos nuestro objetivo: crearnos la vida que deseamos alegrando nuestro espíritu. Mejorando nuestros estados de ånimo se nos hace mas fácil afrontar las circunstancias reales. Y no olviden que los extremos siempre son peligrosos. Mantengan un equilibrio sano.

¡Ahora, a soñar despiertos, a llevar nota de todo y a ser felices!

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