Entramos en el momento pico del uso de pirotecnia y somos testigos de estos eventos detonantes desde el Día de Acción de Gracias y se extenderán hasta el Día de Reyes.

Hemos visto que en los últimos años se han iniciado campañas educativas para atacar la nueva versión de balas al aire, es decir las detonaciones producto de la pirotecnia. No podemos decir que es algo cultural porque esa práctica viene de países tan lejanos como China, así que no es algo autóctono y puede ser erradicado de nuestros rituales de despedida de año si nos lo proponemos.

Propongo que las detonaciones sean sustituidas por abrazos. Y esto se logra con educación desarrollando mayor compasión hacia toda forma de vida. La causa por la que abogo es el bienestar animal, pero también la pirotecnia afecta al ambiente, niños con ciertas condiciones, envejecientes y ni hablar de muchos veteranos de guerra que rememoran sus tiempos de guerra en las detonaciones de cuartos de dinamita y petardos que se convierten para ellos en una gran pesadilla.

Demasiadas desgracias que esta práctica provoca a nuestras familias. Desde accidentes con niños y adultos, pérdida y muerte de mascotas amadas, discordias entre vecinos y un nivel de ansiedad que no necesitamos en estos momentos en Puerto Rico. Si entras a las redes sociales da lástima los hechos reales que se relatan todos los días por el uso de la pirotecnia de manera irresponsable, injusta e innecesaria.

Para poder ayudarles creo conveniente que, en lo que vamos avanzado a un próximo nivel en cuando a educación y prevención de se trata, ofrecer algunos consejos útiles para proteger a nuestras mascotas:

• No dejarlas en el patio o marquesina en despedida de año
• Ponerlas en un cuarto, si posible con aire acondicionado y música o la televisión encendida
• Nunca amarrarla, se va a hacer daño y morir por estrangulación o heridas
• Tenerle en el collar una chapa para que pueda identificarse a su guardián, veterinario o dirección
• Tenga una foto reciente en caso que se escape poder promover su identidad en las redes
• No la agreda si se pone  ansiosa, es su reacción ante las detonaciones que las percibe tres o cuatro veces más intensas que los humanos
• Converse con sus vecinos para evitar pirotecnia en su calle o condominio
• Considere servicio de “boarding” si tiene una actividad familiar y no puede estar pendiente de su mascota
• Consulte a su veterinario para administrarle un calmante
• Promueva en su comunidad, condominio, urbanización campañas en contra de la pirotecnia
• Use su sentido común y buen juicio, será su mejor arma en estas fiestas

Todos somos responsables de erradicar la pirotecnia de nuestras festividades, como lo pudimos erradicar en el caso de las balas al aire.

La Policía de Puerto Rico debe tomar un rol más agresivo en esta iniciativa y el Gobierno debe también contribuir, junto a muchas organizaciones sin fines de lucro cuyas causas son los animales o humanos como las que trabajan con condiciones como autismo, envejecientes, niñez. Al fin y al cabo, en la unión esta la fuerza y si nos unimos todos el próximo año podemos hacer algo realmente impactante para llamar a la cordura y la empatía como una sociedad madura y compasiva. El gobierno no lo puede hacer solo.

Vamos a hacer menos Ruido y promover más Compasión en estas Navidades. Esa es una decisión personal e individual que impactará de manera positiva a todo nuestra sociedad.