(Corregido)

Había una vez, y dos son tres…

Al Rescate de la Esperanza, que Anda Realenga… y hay que Atraparla

El Abuelo llamó a sus nietos, un día en que el sol descansaba más temprano e inundaba la Sala de sus últimos rayos de luz. Los mandó a sentarse en el Piso de madera añejada. Quería habalr con ellos, narrarle, tal vez, algo parecido a un Cuento. Los niños con su patalones cortos obedecieron y se sentaron, había de ambos sexos.

Antes, comenzó el Abuelo. Había una modeda que se lamaba medio peso, equivalía a 5o centavos, ya no existe También teníamos billetes de $2.00, difícil encontrar uno ahora, yo tengo 2 guardados. Era la época en que Lalo y Lolita jugaban a las Escondidas y Rosita jugaba “jacks” con Marilú. Muchos se apuntaban para jugar la “Peregrin, otros preferían irse a comer grosellas o quenepas, algunos osados, subían al árbol para tomarlas de primera mano.

Recuerdo haber visto a muchos con la boca embarrada por los mangoes que haeían consumido. La Abuela Jacinta hacía una Pasta de mango que le zumbaba la manigueta. Ceca de la Casa famiiar había vecinos que compartían alimentos cocinados, llamaban or la ventana de atrás, donde estaba el fregadero a Bartolo, el que tenía una flauta con un solo boquetito… y a doña Pascacia, la que cojía los jueyes en grandes cantidades para luego compartir.

La tía Adelina hacía unas yemitas de coco, para chuparse los dedos, mientras la Paquita hacía sus famosos dulces de leche en cuadritos. Muchos gustaban cuando el olor de los sorullos de harina de maíz hechos al caróon, llegaba al Vecindario.

Los niños, atentos, escuchaban los Relatos del Abuelo. Uno de ellos preguntó si sus vecinos tenían velocípedos y bicicletas. El les contestó que también habían teresinas y patines, con los cuales, algunos al comenzar el apredizaje se caían y había muchas rodillas que curar.

Hubo una historia que siempre se repetía, dijo el Abuelo, fue la narración que escuhaba cerca del arbolito de Navidad de un Niño Especial. Nos decían que había nacido en un Pesebre de pajas, un lugar humilde para enseñarños a ser humildes, algo que muchos no han aprendido todavía.

Dice la vieja historia que Reyes de Oriete vinierona adoarle, se postraron y le obsequiaron oro, incienso y mirra. Aquella estrella luminosa iluminó aquel lugar especial. Se comentaba que los Pastorers de la Aldea vinieron gozosos para conocerlo y rendirle honores, ellos habían escuchado la Profecía.

⁶ Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz.

El Abuelo terminó la Tertulia, se levantó de viejo sillón, cogió el bastón, luego de obsequiar a los niños con nueves, avellanas y bombones. Se puso la boina y anduvo hacia el Batey para echarle maíz a las gallinas… con caminar lento y firme, había una cez…

Niño Juguetón

“Este niño Dios me ha salido un juguetón,

Quiere halarle la barba a Gaspar y Melchor.

Tiene sus ojos embelesaos

En los rayitos del rubio sol.

Sueña con las ovejas del buen pastor;

Busca con sus manos el viejo tambor

Del niño estrella, del niño canción.

Y es como si entonara, pom-pom-pom.

María lo mira por su gran  esplendor,

José lo acaricia con su amor,

Y los chicos del barrio corren alrededor

Como si buscaran juego a este niño juguetón.

Allá vino la señera vaca con su calor,

El burrito Platero, el de Juan Ramón,

Y el gallo de Amaury quiso cantar,

Un le-lo-lay; un le-lo-lá”

Prof. José Antonio Giovannetti Román   787 856 1610   787 644 8818

P.D. Mis excusas a quienes habían leído este Blog con muchos errores, estaba sin corregir y era para otro día, las máquinas fallan y nosotros fallamos, perdonen.