“En la prosperidad, nuestros amigos nos conocen; en la adversidad, nosotros conocemos a nuestros amigos”

Si Dios un día cegara toda fuente de luz,

el universo se alumbraría

con esos ojos que tienes tú.

Pero si –lleno de agrios enojos

por tal blasfemia– tus lindos ojos

Dios un día te arrancase, para que el mundo

con la alborada de tu pupila no se alumbrase;

aunque quisiera, Dios no podría

tender la noche sobre la nada….

Porque aún el mundo se alumbraría

con el recuerdo de tu mirada!

José P.H. Hernández

Hay varias versiones historias sobre el Origen del Día de San Valentín, Día del Amor y la Amistad. Una de las más repetidas es la del Monje Cristiano que acostumbraba casar los jóvenes que vivían en concubinato. Al Emperador Claudio II, no le simpatizaba la acción, porque alegadamente los soldados rendían una labor deficiente el el Campo de Batalla, al estar casados.

Decidido el Emperador lo mandó a matar por degollamiento. Mientras estuvo preso San Valentinus, la hija del Carcelero, que era ciega, le proveía alimentos. Dice la leyenda, que en una oración de fe, logró que la joven recobrara la Vista. La misma Leyenda comenta que San Valentinus tomó hojas de trébol, las cuales tienen forma de corazón, y en la tierra escribió un último mensaje de despedida a su amiga que le había favorecido con los alimentos. El mensaje decía: “De tu Valentín”. El Monje valoró la Amistad de aquella jovencita y se lo agradeció.

“Y anden en amor, así como también Cristo les amó y se dio a sí mismo por nosotros, ofrenda y sacrificio a Dios, como fragante aroma.”

Efesios 5:2

Finalmente, en el Año 272, en una de las siete Colinas de Roma, San Valentinus fue enterrado luego de haber sido degollado. Se dice que del lugar donde fue enterrado, brotó un árbol de almendra, símbolo del Amor eterno.

Desde entonces la costumbre de colocar en un pedazo de tela de tul doce almendras amarradas, se utiliza simbolizando los 12 meses del año, 12 meses de Amor.

Era mi amiga

Era mi amiga, pero yo la amaba
yo la amaba en silencio puramente,
y mientras sus amores me contaba
yo escuchaba sus frases tristemente.

Era mi amiga, pero me gustaba
y mi afán era verla a cada instante.
Nunca supo el amor que yo albergaba
porque siempre me hablaba de su amante.

Era mi amiga para todo el mundo
porque a nadie mi amor yo confesaba,
pero yo la quería muy profundo
y forzosamente me callaba.

Era mi amiga, y mi cuerpo sentía
estremecer si ella me miraba,
al oírla junto a mí feliz me hacía
más de este amor ella nunca supo nada
y aunque solo mi amistad yo le ofrecía,
era mi amiga, pero yo la amaba.

José Angel Buesa

Esperando que tengan un rico día donde prevalezca la armonía entre todos los que habitamos esta hermosa Tierra borincana. Si hacemos pequeños Actos irreflexivos de Amor y Amistad, estaremos abonando a una buena y sana convivencia con familiares y amistades. Sean felices y hagan feliz a alguien.

A la vuelta de la esquina, cuando menos lo esperes, alguien pudiera estar esperando o pensando en ti. Ámate tu también.  Te veré en el Camino… espero por tu Saludo.

Prof. José Antonio Giovannetti Román  787 644 8818

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