A diario, en el caminar, son muchas las bendiciones que recibes, no empece, hay días en los cuales las Situaciones difíciles se agolpan. Hacen una juntilla para intentar quitar: la paz, la alegría, el enfoque, el equilibrio. Hay Asuntos que pudieran quitarte el balance y perder el equilibrio, emocionalmente uno pudiese caerse, quedar abrumado y deprimido. Hay que balancearse en la cuerda floja y mantener el equilibrio, sin hacer piruetas arriesgadas.

Es: la voluntad, el conocimiento la experiencia, las fortalezas internas, la fe, el entusiasmo de vivir… lo que te permite y me permite personalmente seguir caminando, con la frente en alto, con paso firme tras la Esperanza realenga, la cual hay que atraparla.

Algo que he aprendido en mi Vida, es que somos seres interdependientes, dependemos los unos de los otros, aunque en ocasiones, no consigas satisfacer tus necesidades, por la apatía o mal agradecimiento de algunos. Me ha ocurrido que he pedido un favor en los aspectos técnicos de la Nueva Era, y no he conseguido la Ayuda. No soy persona de suplicar, doblo la esquina y busco otro transeúnte en ánimo de ayudarme, de lo contrario, pospongo la brega. Son muchas las ocasiones en que he encontrado la solución yo mismo.

No todo el que sonríe, tiene alegría, no todo el que te saluda, lo hace con sinceridad, no todo lo que brilla, es oro. Lo dice el dicho: “Las apariencias, engañan”. Sabido es  por algunos, que suelo tomar la bandeja una vez consumidos los alimentos de desconocidos, y llevarlas al zafacón. No lo hago en espera de una recompensa, simplemente, me place. A lo mejor, luego ellos se lo hacen a un viejito con dificultades en su caminar.

Son los pequeños detalles los que marcan la diferencia a la indiferencia. Yo lo he llamado, parafraseando a alguien: “Actos irreflexivos de Amor”. En mi camino recibo Saludos, también me hacen preguntas, alegando que tengo conocimiento, les digo que no se mucho, pero lo que se, lo comparto. Hay quienes sabiendo mucho, se callan. Son los que el compartir no forma parte de su equipaje.

Cuando paso por un momento malo o recibo una mala noticia, es cuando más intento hacer Actos positivos o me expreso positivamente, en el ánimo de beneficiar a un semejante. A veces, la máscara de Payaso uno se la tiene que poner, llevando la tristeza por dentro… o la preocupación.

Hay compañías indeseables: la soledad y la ausencia de solidaridad. Hay tesoros anhelados: la salud para uno, la de la familia y las personas que siguen consejos.

Al presente, algunas amistades y allegados familiares, están en un escenario preocupante de Salud. Urge que ocurran varios milagros. Creo en los milagros. Es posible, algún lector, en solidaridad, me ayude a verlos hecho realidad.

Prof. José Antonio Giovannetti Román

@AntonioGiovan13

Al Rescate de la Esperanza, que anda realenga… y hay que atraparla