Con el tiempo uno aprende que, no todo el público está de acuerdo contigo en el escenario de la Vida. Uno comprende los desaciertos de algunos y cómo se proyecta en la manera de evaluarte. Hay quien no tolera los logros del prójimo, por su baja Auto Estima. Existen seres humanos los cuales les corroe internamente, sus envidias, rencores y odios. Una mochila cargada de resentimientos, pesa mucho y es difícil cargarla, se joroban.

Al reconocer lo que otro hace bien, elogiar las acciones positivas, agradecer el estímulo que alguien te ofreció en un momento dado, te permite crecer como ser humano. La sensibilidad se nota a flor de piel. La sonrisas son espontáneas y uno puede caminar con la frente en alto. Es más fácil disfrutar de la alegría de existir.

Emular aquellas personas cuyas acciones son positivas o fueron en el pasado, nos ofrece la brújula a seguir. Nuestro enfoque y equilibrio serán a la medida, para cuando se descorra el telón, en las distintas experiencias del diario vivir,  y así, como consecuencia, tengamos oportunidades para salir airosos.

Es buen trapecista el que teniendo ua condición física, logra concentrarse para mantener el dominio de la acción, con sus destrezas adquiridas con la práctica y ejercicio. Asimismo el alpinista logra escalar las montañas, venciendo la montaña del miedo y teniendo los movimientos equilibrados de su cuerpo, para escalar lo que aparenta ser inalcanzable.

Recientemente conocí unas personas de visita en Yauco, eran naturales de España y se aprestaban a regresar a su País. Sin conocerme de antemano, pude conversar por breves minutos y capté en ellos una simpatía singular, equilibrio mental y gran sensibilidad. Fue un placer conversar con desconocidos con un equipaje en su mochila emocional saludable.

Existen sobradas razones para buscar estilos de Vida conducentes al disfrute de esta vida terrenal, con equilibrio, enfoque, balance y motivación.

Prof. José Antonio Giovannetti Román

@AntonioGiovan12